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à øÈàÄéúÄé àÆú-àÂãÉðÈé ðÄöÌÈá òÇì-äÇîÌÄæÀáÌÅçÇ, åÇéÌÉàîÆø äÇêÀ äÇëÌÇôÀúÌåÉø åÀéÄøÀòÂùÑåÌ äÇñÌÄôÌÄéí åÌáÀöÇòÇí áÌÀøÉàùÑ ëÌËìÌÈí, åÀàÇçÂøÄéúÈí, áÌÇçÆøÆá àÆäÁøÉâ: ìÉà-éÈðåÌñ ìÈäÆí ðÈñ, åÀìÉà-éÄîÌÈìÅè ìÈäÆí ôÌÈìÄéè.
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1 VI al Señor que estaba sobre el altar, y dijo: Hiere el umbral, y estremézcanse las puertas: y córtales en piezas la cabeza de todos; y el postrero de ellos mataré á cuchillo: no habrá de ellos quien se fugue, ni quien escape.
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á àÄí-éÇçÀúÌÀøåÌ áÄùÑÀàåÉì, îÄùÌÑÈí éÈãÄé úÄ÷ÌÈçÅí; åÀàÄí-éÇòÂìåÌ, äÇùÌÑÈîÇéÄí--îÄùÌÑÈí, àåÉøÄéãÅí.
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2 Aunque cavasen hasta el infierno, de allá los tomará mi mano; y si subieren hasta el cielo, de allá los haré descender.
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â åÀàÄí-éÅçÈáÀàåÌ áÌÀøÉàùÑ äÇëÌÇøÀîÆì, îÄùÌÑÈí àÂçÇôÌÅùÒ åÌìÀ÷ÇçÀúÌÄéí; åÀàÄí-éÄñÌÈúÀøåÌ îÄðÌÆâÆã òÅéðÇé, áÌÀ÷ÇøÀ÷Çò äÇéÌÈí--îÄùÌÑÈí àÂöÇåÌÆä àÆú-äÇðÌÈçÈùÑ, åÌðÀùÑÈëÈí.
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3 Y si se escondieren en la cumbre del Carmelo, allí los buscaré y los tomaré; y aunque se escondieren de delante de mis ojos en el profundo de la mar, allí mandaré á la culebra, y morderálos.
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ã åÀàÄí-éÅìÀëåÌ áÇùÌÑÀáÄé ìÄôÀðÅé àÉéÀáÅéäÆí, îÄùÌÑÈí àÂöÇåÌÆä àÆú-äÇçÆøÆá åÇäÂøÈâÈúÇí; åÀùÒÇîÀúÌÄé òÅéðÄé òÂìÅéäÆí ìÀøÈòÈä, åÀìÉà ìÀèåÉáÈä.
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4 Y si fueren en cautiverio, delante de sus enemigos, allí mandaré al cuchillo, y los matará; y pondré sobre ellos mis ojos para mal, y no para bien.
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ä åÇàãÉðÈé éÀäåÄä äÇöÌÀáÈàåÉú, äÇðÌåÉâÅòÇ áÌÈàÈøÆõ åÇúÌÈîåÉâ, åÀàÈáÀìåÌ, ëÌÈì-éåÉùÑÀáÅé áÈäÌ; åÀòÈìÀúÈä ëÇéÀàÉø ëÌËìÌÈäÌ, åÀùÑÈ÷ÀòÈä ëÌÄéàÉø îÄöÀøÈéÄí.
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5 El Señor Jehová de los ejércitos es el que toca la tierra, y se derretirá, y llorarán todos los que en ella moran: y subirá toda como un río, y hundiráse luego como el río de Egipto.
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å äÇáÌåÉðÆä áÇùÌÑÈîÇéÄí îÇòÂìåÉúÈå, åÇàÂâËãÌÈúåÉ òÇì-àÆøÆõ éÀñÈãÈäÌ; äÇ÷ÌÉøÅà ìÀîÅé-äÇéÌÈí, åÇéÌÄùÑÀôÌÀëÅí òÇì-ôÌÀðÅé äÈàÈøÆõ--éÀäåÈä ùÑÀîåÉ.
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6 El edificó en el cielo sus gradas, y ha establecido su expansión sobre la tierra: él llama las aguas de la mar, y sobre la haz de la tierra las derrama: Jehová es su nombre.
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æ äÂìåÉà ëÄáÀðÅé ëËùÑÄéÌÄéí àÇúÌÆí ìÄé áÌÀðÅé éÄùÒÀøÈàÅì, ðÀàËí-éÀäåÈä: äÂìåÉà àÆú-éÄùÒÀøÈàÅì, äÆòÁìÅéúÄé îÅàÆøÆõ îÄöÀøÇéÄí, åÌôÀìÄùÑÀúÌÄéÌÄéí îÄëÌÇôÀúÌåÉø, åÇàÂøÈí îÄ÷ÌÄéø.
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7 Hijos de Israel, ¿no me sois vosotros, dice Jehová, como hijos de Etiopes? ¿no hice yo subir á Israel de la tierra de Egipto, y á los Palestinos de Caphtor, y de Chîr á los Arameos?
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ç äÄðÌÅä òÅéðÅé àÂãÉðÈé éÀäåÄä, áÌÇîÌÇîÀìÈëÈä äÇçÇèÌÈàÈä, åÀäÄùÑÀîÇãÀúÌÄé àÉúÈäÌ, îÅòÇì ôÌÀðÅé äÈàÂãÈîÈä: àÆôÆñ, ëÌÄé ìÉà äÇùÑÀîÅéã àÇùÑÀîÄéã àÆú-áÌÅéú éÇòÂ÷Éá--ðÀàËí-éÀäåÈä.
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8 He aquí los ojos del Señor Jehová están contra el reino pecador, y yo lo asolaré de la haz de la tierra: mas no destruiré del todo la casa de Jacob, dice Jehová.
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è ëÌÄé-äÄðÌÅä àÈðÉëÄé îÀöÇåÌÆä, åÇäÂðÄòåÉúÄé áÀëÈì-äÇâÌåÉéÄí àÆú-áÌÅéú éÄùÒÀøÈàÅì, ëÌÇàÂùÑÆø éÄðÌåÉòÇ áÌÇëÌÀáÈøÈä, åÀìÉà-éÄôÌåÉì öÀøåÉø àÈøÆõ.
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9 Porque he aquí yo mandaré, y haré que la casa de Israel sea zarandeada entre todas las gentes, como se zarandea el grano en un harnero, y no cae un granito en la tierra.
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é áÌÇçÆøÆá éÈîåÌúåÌ, ëÌÉì çÇèÌÈàÅé òÇîÌÄé: äÈàÉîÀøÄéí, ìÉà-úÇâÌÄéùÑ åÀúÇ÷ÀãÌÄéí áÌÇòÂãÅéðåÌ--äÈøÈòÈä.
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10 A cuchillo morirán todos los pecadores de mi pueblo, que dicen: No se acercará, ni nos alcanzará el mal.
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éà áÌÇéÌåÉí äÇäåÌà, àÈ÷Äéí àÆú-ñËëÌÇú ãÌÈåÄéã äÇðÌÉôÆìÆú; åÀâÈãÇøÀúÌÄé àÆú-ôÌÄøÀöÅéäÆï, åÇäÂøÄñÉúÈéå àÈ÷Äéí, åÌáÀðÄéúÄéäÈ, ëÌÄéîÅé òåÉìÈí.
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11 En aquel día yo levantaré el tabernáculo de David, caído, y cerraré sus portillos, y levantaré sus ruinas, y edificarélo como en el tiempo pasado;
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éá ìÀîÇòÇï éÄéøÀùÑåÌ àÆú-ùÑÀàÅøÄéú àÁãåÉí, åÀëÈì-äÇâÌåÉéÄí, àÂùÑÆø-ðÄ÷ÀøÈà ùÑÀîÄé, òÂìÅéäÆí: ðÀàËí-éÀäåÈä, òÉùÒÆä æÌÉàú. {ô}
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12 Para que aquellos sobre los cuales es llamado mi nombre, posean el resto de Idumea, y á todas las naciones, dice Jehová que hace esto.
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éâ äÄðÌÅä éÈîÄéí áÌÈàÄéí, ðÀàËí-éÀäåÈä, åÀðÄâÌÇùÑ çåÉøÅùÑ áÌÇ÷ÌÉöÅø, åÀãÉøÅêÀ òÂðÈáÄéí áÌÀîÉùÑÅêÀ äÇæÌÈøÇò; åÀäÄèÌÄéôåÌ äÆäÈøÄéí òÈñÄéñ, åÀëÈì-äÇâÌÀáÈòåÉú úÌÄúÀîåÉâÇâÀðÈä.
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13 He aquí vienen días, dice Jehová en que el que ara alcanzará al segador, y el pisador de las uvas al que lleva la simiente; y los montes destilarán mosto, y todos los collados se derretirán.
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éã åÀùÑÇáÀúÌÄé, àÆú-ùÑÀáåÌú òÇîÌÄé éÄùÒÀøÈàÅì, åÌáÈðåÌ òÈøÄéí ðÀùÑÇîÌåÉú åÀéÈùÑÈáåÌ, åÀðÈèÀòåÌ ëÀøÈîÄéí åÀùÑÈúåÌ àÆú-éÅéðÈí; åÀòÈùÒåÌ âÇðÌåÉú, åÀàÈëÀìåÌ àÆú-ôÌÀøÄéäÆí.
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14 Y tornaré el cautiverio de mi pueblo Israel, y edificarán ellos las ciudades asoladas, y las habitarán; y plantarán viñas, y beberán el vino de ellas; y harán huertos, y comerán el fruto de ellos.
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èå åÌðÀèÇòÀúÌÄéí, òÇì-àÇãÀîÈúÈí; åÀìÉà éÄðÌÈúÀùÑåÌ òåÉã, îÅòÇì àÇãÀîÈúÈí àÂùÑÆø ðÈúÇúÌÄé ìÈäÆí--àÈîÇø, éÀäåÈä àÁìÉäÆéêÈ. {ù}
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15 Pues los plantaré sobre su tierra, y nunca más serán arrancados de su tierra que yo les dí, ha dicho Jehová Dios tuyo.
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